Primero realizamos el puré de castañas: ponemos las castañas a cocer en agua con una pizca de sal. Las dejamos 20 min y las retiramos. Cuando estén frías procedemos a pelarlas y vertimos 220 ml de leche por encima, previamente calentada. Incorporamos la mantequilla y dejamos que se funda con el calor de la leche, añadimos una pizca de sal y trituramos...
Ingredientes
Elaboración
Primero realizamos el puré de castañas: ponemos las castañas a cocer en agua con una pizca de sal. Las dejamos 20 min y las retiramos. Cuando estén frías procedemos a pelarlas y vertimos 220 ml de leche por encima, previamente calentada. Incorporamos la mantequilla y dejamos que se funda con el calor de la leche, añadimos una pizca de sal y trituramos.
Seguimos con la Panna Cotta: ponemos en un cazo 300ml de leche, la nata, el azúcar y el puré de castañas. Removemos bien y ponemos las hojas de gelatina en remojo.
Cuando empiece a hervir, retiramos del fuego y seguimos removiendo un par de minutos. Escurrimos bien la gelatina y la incorporamos al cazo mezclando bien.
Vertimos la mezcla en el molde y la dejamos reposar hasta que se temple. Después la introducimos en el frigorífico y esperamos a que esté totalmente cuajada (si podemos dejarlo 12 horas mucho mejor).
Emplatamos la panna cotta como más nos guste y añadimos el caramelo líquido o la mezcla que hayamos escogido. También podemos añadir una castaña hervida en la parte superior para darle un toque especial. ¡Voilá!
Ingredientes
Instrucciones
Primero realizamos el puré de castañas: ponemos las castañas a cocer en agua con una pizca de sal. Las dejamos 20 min y las retiramos. Cuando estén frías procedemos a pelarlas y vertimos 220 ml de leche por encima, previamente calentada. Incorporamos la mantequilla y dejamos que se funda con el calor de la leche, añadimos una pizca de sal y trituramos.
Seguimos con la Panna Cotta: ponemos en un cazo 300ml de leche, la nata, el azúcar y el puré de castañas. Removemos bien y ponemos las hojas de gelatina en remojo.
Cuando empiece a hervir, retiramos del fuego y seguimos removiendo un par de minutos. Escurrimos bien la gelatina y la incorporamos al cazo mezclando bien.
Vertimos la mezcla en el molde y la dejamos reposar hasta que se temple. Después la introducimos en el frigorífico y esperamos a que esté totalmente cuajada (si podemos dejarlo 12 horas mucho mejor).
Emplatamos la panna cotta como más nos guste y añadimos el caramelo líquido o la mezcla que hayamos escogido. También podemos añadir una castaña hervida en la parte superior para darle un toque especial. ¡Voilá!